Podemos decir que la alergia primaveral es causada principalmente por la polinización. Y es que el polen se suele concentrar en el aire en grandes cantidades; esto se debe al ciclo reproductor de determinadas plantas.
La intensidad de la alergia primaveral depende del nivel de las lluvias y las altas temperaturas, existiendo un mayor grado de polinosis en la primavera, afectando así a muchas personas alérgicas.
La alergia primaveral perjudica a un alto porcentaje de personas en todo el mundo (hasta un 15% de toda la población mundial).
Por ello, es importante que las personas que sufren de alergias, tomen las precauciones correctas en la época de primavera.
Esto con la finalidad de prevenir riesgos a causa de la polinización, por lo que se recomienda someterse a tratamientos de hipo sensibilización unos meses antes.
¿Qué es la alergia y el polen?
La alergia se da como una respuesta hacía un agente externo, debido a que el sistema inmunitario lo reconoce como un agresor.
Por ello, nuestro cuerpo produce anticuerpos para combatir cualquier tipo de alérgeno que nos resulte dañino.
Existen muchos alérgenos como el polen, picaduras de insectos, ácaros, alimentos, entre otros. Y, cuando ingresan a nuestro organismo, reaccionamos con distintos tipos de síntomas.
En cuanto al polen, esta una partícula que emiten las plantas masculinas con la finalidad de fecundar a las plantas femeninas.
Aunque el polen no se ve a simple vista, existen millones de partículas esparcidas por todo el aire, siendo esta la causa principal de las alergias primaverales.
Recodemos que la concentración del polen que existe en el ambiente, dependerá en gran parte de las condiciones climáticas en el lugar.
Causas de la alergia primaveral
La causa principal de la alergia en primavera, es el alto desencadenamiento del polen. Y es que, en esta época del año, las plantas se reproducen y se esparcen a través del aire y de los insectos, hasta llegar a la planta femenina.
Nuestro sistema inmune detecta el polen como un enemigo o amenaza, por lo que libera histamina para combatirla. Por lo tanto, por causa de la concentración de polen en el ambiente, es que la mayoría de las personas sufren de las molestas alergias.
En relación a esto, las alergias que se producen en primavera son las siguientes:
Alergia al polen
Existen muchos tipos de polen debido a la gran variedad de plantas en el planeta, por lo que algunas de ellas tienen una capacidad alergénica mayor, como es el caso del trigo, arroz, maíz, entre otras.
El tiempo de prolongación puede ser muy extenso, debido a que las plantas florecen en distintos momentos del año.
Y recordemos que no solamente las plantas producen polen, también los árboles lo hacen, siendo los más comunes el olivo, plátano y muchos más.
Alergia al sol
Esta alergia se produce en los días luminosos prolongados (cuando existen muchas horas de sol). En este caso, el principal síntoma visible son las alteraciones o afecciones en la piel.
Aunque no se sabe en su totalidad por qué sucede en algunas personas y en otras, las causas pueden ser un componente hereditario, algunos medicamentos o ciertas plantas.
Síntomas de la alergia primaveral
La primavera afecta a muchas personas, sobre todo las que sufren de alergias a causa del polen, siendo los síntomas más comunes los siguientes:
- Ojos llorosos o lagrimeo.
- Picor en la garganta y nariz.
- Inconvenientes para respirar.
- Estornudos y tos frecuente.
- Hinchazón.
- Mucha fatiga.
- Dificultad a la hora de dormir.
- Dolores de cabeza.
Medidas preventivas para evitar la alergia primaveral
Las medidas preventivas contra la alergia primaveral, se basan principalmente en evitar el contacto con el polen y los ácaros, por lo que debes tener en cuenta lo siguiente:
- En las horas soleadas, es importante mantener las ventanas cerradas.
- Al atardecer, debes ventilar la casa.
- No entrar a parques y jardines en primavera.
- Usar lentes de sol.
- No realizar muchas actividades al aire libre en primavera.
- Es importante que seques tu ropa en el interior del hogar.
- Para combatir los ácaros, es importante limpiar con frecuencia la ropa, colchones y más.
- La humedad y la temperatura de la casa debe ser la adecuada, para evitar la aparición del ácaro.
- En caso de que existan reacciones alérgicas, debes tomar la medicación correcta para combatir el síntoma.
- Debes realizarte un estudio para saber a qué tipo de alérgenos eres sensible.
- No salir en las horas donde existe un mayor nivel de polen.
- Al andar en el coche, debes mantener las ventanas arribas si es posible.
- En los días de vientos fuertes, es preferible estar resguardado en el hogar, porque habrá mucho polen en el ambiente.
- Si tienes que pasar mucho tiempo fuera del hogar, debes usar protección (mascarillas, por ejemplo) para evitar que el polen ingrese en tu organismo.
- No cortes ni te sientes en el césped.
- Si es posible, consulta los niveles de polen que existen en el ambiente antes de salir.
¿Cómo tratar la alergia al polen?
Para tratar este tipo de alérgeno, se utilizan los siguientes métodos:
Inmunoterapia
También se conoce como vacuna para la alergia. El tratamiento consiste en administrar un elemento que provoca la alergia y se implementa varias veces con dosis cada vez más elevadas.
Con la aplicación de este tratamiento, podrás controlar o eliminar por completo la alergia. El proceso de la inmunoterapia puede durar de 3 a 5 años.
Antihistamínicos
Estos tipos de medicamentos se utilizan para aliviar los síntomas de la alergia, debido a que bloquean la histamina, la cual es una sustancia química que provoca que tengamos los síntomas de la alergia de primavera.
Los Antihistamínicos naturales eficientes son:
¿Cómo diferenciar entre la alergia primaveral y el resfriado común?
La alergia primaveral y el resfriado común pueden llegar a confundir a las personas, debido a que comparten ciertos síntomas, como el estornudo o la congestión nasal. Pero, existen formas de identificar estas afecciones y aquí te las diremos:
Con respecto al síntoma de la mucosidad, en la alergia es muy líquida y transparente.
Las personas que tienen alergias, presentan muchos síntomas que no son típicos del resfriado, como lo son el enrojecimiento, picor o conjuntivitis.
También, algo muy influyente es la duración, ya que el resfriado se puede superar en 1 semana o poco más. Mientras, que la alergia primaveral, se puede extender por todo el tiempo que dure esta estación del año.
